El hecho de tener un negocio viene acompañado de ciertas obligaciones a nivel contable y fiscal. Una de estas es la declaración del IVA al organismo recaudatorio, y no siempre es tan sencillo como parece. Ya de por sí suele ser complicado, pero cuando hablamos de negocios online con venta en Amazon u otros marketplaces puede serlo aún más. En este artículo vamos a explicar todo lo que necesitas saber sobre la declaración del IVA, el objetivo de este impuesto y cómo hacer las declaraciones de forma correcta para no cometer ninguna irregularidad en tu negocio online.
¿Qué es el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA)?
El Impuesto sobre el Valor Añadido, más conocido como IVA, es un impuesto de naturaleza indirecta que los consumidores del producto o servicio pagan cuando adquieren dicho bien o servicio. Por lo que al precio neto se le tiene que aplicar el tipo de IVA correspondiente, que puede ser:
- IVA superreducido: 4%
- IVA reducido: 10%
- IVA general: 21%
Aunque también cabe destacar que ciertas actividades están exentas de la declaración del IVA, como las operaciones médicas, algunas actividades socioculturales y deportivas, operaciones financieras, seguros, inmobiliarias o educativas. Por lo que la pregunta para los bienes y servicios que se tiene que declarar el IVA es:
¿Por qué las pymes y los autónomos tienen que preocuparse por este impuesto si lo paga el consumidor final?
El impuesto no grava la actividad de este negocio, pero al fin y al cabo, tienen que pagar el IVA soportado cuando adquieren bienes o servicios para su empresa. Sin embargo, esta cantidad se podrá recuperar posteriormente. Además, las empresas que cobran por vender estos bienes o servicios se convierten indirectamente en recaudadores de IVA (IVA devengado), por lo que actúan como personas jurídicas y, por lo tanto, están obligadas al cumplimiento de la actividad tributaria.
La información se detalla en un informe, generalmente en el modelo 303, donde se calcula qué cantidad de la diferencia entre el IVA devengado y el IVA soportado que hay que pagar a Hacienda. Este modelo se presenta cada tres meses, que es lo que comúnmente se conoce como la declaración del IVA trimestral. Aunque en algunos casos también se puede hacer de forma mensual.
Cabe destacar que el IVA es un impuesto que no se aplica en todo el territorio español. Pues en Canarias, Ceuta y Melilla aplican otra figura impositiva de naturaleza indirecta.
¿Cuándo se tiene que presentar la declaración trimestral del IVA?
La declaración del IVA trimestral se hace a través de la cumplimentación del modelo 303 según la tributación, ya sea por régimen general o por régimen especial. Se envía de forma telemática o presentándose en papel cada trimestre dentro del plazo estipulado. De lo contrario, se tendrá que hacer frente a sanciones de carácter económico dependiendo del tiempo que ha pasado del día límite de la presentación o del error cometido. Las fechas son las siguientes:
- Primer trimestre: del 1 al 20 de abril
- Segundo trimestre: del 1 al 20 de julio
- Tercer trimestre: del 1 al 20 de octubre
- Cuatro trimestres: del 1 al 20 de enero
Posibles casos en la declaración del IVA
A veces nos encontramos con situaciones donde no hay nada que recaudar, o que el IVA soportado supera al IVA devengado. En algunos casos muchos negocios se preguntan si realmente tienen que presentar el modelo a Hacienda. La respuesta es sí. En el mismo formulario hay varias opciones que especificamos a continuación.
A veces puede resultar que el saldo sea positivo, también conocido como “a ingresar”, por lo que se tendrá que ingresar la cantidad a la Agencia Tributaria.
Del mismo modo, puede ocurrir que, por la razón que sea, no se ha realizado actividad, también conocido como “sin actividad”. En este caso no se está devengando ni soportando IVA, por lo que se tiene que marcar la casilla 71.
Cuando el saldo es negativo, por ejemplo porque un negocio ha realizado algún tipo de inversión, pero el volumen de ventas se ha mantenido estable, es probable que el IVA soportado sea mayor que el devengado, por lo que se obtendrá un resultado negativo. En esta situación, podemos encontrarnos con las siguientes situaciones: La primera es que el resultado sale “a compensar”. En este caso, la Agencia Tributaria permite que el saldo negativo cuente como IVA soportado. La segunda es que sale “a devolver”. En este caso solo se puede hacer en el cuarto trimestre.
También se puede hacer la declaración de IVA mensual (REDEME)
No todos los negocios son iguales. Por lo que, obviamente, el modelo trimestral no beneficia a todos por igual, de hecho a veces es hasta contraproducente para el negocio. Pues algunas empresas no pueden optar a la devolución del IVA hasta el último trimestre, así que tienen que esperar hasta el siguiente año. De este modo, desde 2014 se permite a los negocios optar por la declaración mensual del IVA dentro del Régimen Especial de Devolución Mensual (REDEME). Para ello, se tiene que hacer a través del modelo 303. En este caso solo se puede hacer de forma telemática entre el 1 y el 25 del mes siguiente. Además, hay algunos requisitos que se deben cumplir, en este blog tenéis más información.
El objetivo de la declaración del IVA trimestral (o mensual), ¿cuál es?
El objetivo principal de que la declaración del IVA sea trimestral (y en algunos casos mensual) es porque de este modo, Hacienda puede asegurarse de forma periódica de ir cobrando los impuestos y tener más margen de actuación para evitar que se produzcan impagos. Ahora bien, no solo se beneficia Hacienda, también los propios negocios, ya sean pymes o autónomos. Pues la carga de los pagos distribuida permite no tener que pagar un monto mucho más alto a final de año.
